Mallorca es una isla muy cómoda para viajar con niños y cuenta con una gran oferta para toda la familia.

En Hoteles Saint Michel somos conscientes que los más pequeños también se merecen disfrutar de unas vacaciones. Por eso, proponemos 5 planes para toda la familia en Mallorca que podrás hacer en invierno o verano:

1. Palma Aquarium

Palma Aquarium es un gran referente para el turismo familiar. Los niños entran entusiasmados y salen con mucha ilusión, tras haber visto hasta 8.000 animales de 700 especies diferentes. Las instalaciones de Palma Aquarium están ubicadas en la Playa de Palma, muy cerca de S’Arenal. En las maravillosas salas del Palma Aquarium hay lugar incluso para tumbarse en el suelo mientras se observan los tiburones. ¡Hay varias zonas dónde los niños creerán que están en la selva o bajo el fondo del mar!

2. Parque acuático

Cuando los niños están hartos de playa, regalarles un día en un parque acuático es una opción perfecta e igual de agradecida en verano. En Mallorca hay una gran oferta de parques acuáticos. Por ejemplo, Katmandú Park o Western Water Park en Magaluf, Aqualand en el Arenal o Hidropark situado muy cerca de Playas de Muro y Sa Coma. Mayores y pequeños disfrutarán con los toboganes. ¡Al agua patos!

3. Tren de Sóller

Bienvenido a un paseo por el siglo pasado. Súbete a este tren de madera con toda la familia y traviesa la preciosa Sierra de Tramuntana. Este tren centenario de Mallorca tiene las estaciones centrales en Palma y Sóller. En su ruta se para en diferentes municipios de la montaña y traviesa 13 túneles, puentes y miradores desde dónde se observan valles de olivos y naranjos.

4. Excursión en barco a la isla Sa Dragonera

Desde el embarcadero de Paguera salen diariamente barcos que hacen excursiones a la isla de Sa Dragonera. Una auténtica aventura para retar a los pequeños a ver delfines en el mar. En mitad del camino se puede disfrutar de un buen baño en el medio de esas maravillosas aguas cristalinas y en tierra, se ven infinidad de especies de animales silvestres.

5. Visita a un mercado tradicional

Una de las tradiciones más típicas y pintorescas de Mallorca son los mercados artesanales que una vez por semana salen a la calle en algunos pueblos. Por ejemplo, el de Cala Ratjada se realiza los sábados por la mañana. En él se encuentran artesanos, frutas, verduras y decenas de mostradores con todo tipo de objetos. Un maravilloso paseo con toda la familia.